
El auge de los delitos informáticos ha generado un incremento en las acusaciones relacionadas con fraudes digitales, accesos no autorizados y manipulaciones de información electrónica. Sin embargo, no todas las imputaciones están fundamentadas en pruebas sólidas. Muchas veces, los informes periciales presentan errores técnicos o interpretaciones sesgadas que pueden derivar en acusaciones injustas.
Para los abogados que defienden a personas o empresas acusadas de delitos informáticos, contar con una estrategia basada en la revisión técnica rigurosa de la evidencia digital es clave. En este artículo exploramos las últimas actualizaciones normativas, los errores más comunes en informes periciales y las mejores estrategias de defensa ante acusaciones infundadas.
Defectos en los informes periciales utilizados por la acusación
Los errores en la interpretación de la evidencia digital pueden ser determinantes en un proceso penal. Algunos de los defectos más frecuentes en informes periciales incluyen:
1.- Falta de trazabilidad en la cadena de custodia
- No se documenta correctamente quién, cómo y cuándo se ha manipulado la prueba digital.
- Ausencia de valores hash para verificar la integridad de los archivos extraídos.
- Uso de medios de almacenamiento no protegidos que pueden comprometer la autenticidad de la evidencia.
- Ausencia de una copia de control (hash o imagen forense), lo que impide verificar si la prueba ha sido modificada o manipulada.
- Sin prueba de contraste, la manipulación puede ser total.
2.- Análisis incompleto o sesgado de la información
- Se extraen conclusiones sin una revisión integral de los datos.
- No se contrastan los resultados con fuentes de información alternativas.
- Se omiten elementos técnicos que podrían exculpar al acusado.
3.- Errores en la atribución de actividades digitales
- Asociación incorrecta entre una dirección IP y un individuo.
- Falta de consideración de accesos compartidos o conexiones anónimas.
- Desconocimiento de técnicas como la suplantación de identidad digital o el uso de proxys y VPN.
4.- Uso de herramientas no certificadas o metodologías inadecuadas
- Empleo de software sin validación en el ámbito judicial.
- Falta de replicabilidad de los resultados obtenidos.
- Ausencia de estándares reconocidos en el análisis forense aplicado.
Estrategias de defensa ante acusaciones basadas en evidencias informáticas
Para desmontar una acusación errónea basada en pruebas digitales, es esencial contar con un enfoque técnico que permita evidenciar fallos en la recopilación, tratamiento o interpretación de la información. Algunas estrategias efectivas incluyen:
1.- Revisión forense independiente de la evidencia
- Un perito ingeniero en informática puede realizar un análisis contradictorio para verificar si la prueba presentada cumple con los estándares legales y técnicos.
- Se puede solicitar una auditoría sobre la cadena de custodia y los procedimientos empleados en la obtención de la evidencia.
2.- Impugnación de pruebas digitales obtenidas irregularmente
- Si la evidencia se obtuvo sin autorización judicial o sin cumplir con los protocolos adecuados, puede ser considerada nula en el proceso.
- La falta de documentación en la extracción de datos puede debilitar la solidez del informe pericial de la parte acusadora.
3.- Cuestionamiento de la fiabilidad de los análisis técnicos
- Si la prueba digital se basa en herramientas de análisis automatizadas sin verificación humana, su validez puede ser cuestionada.
- Se debe exigir la documentación de las metodologías utilizadas y evaluar si han sido aplicadas correctamente.
4.- Demostración de accesos indebidos o manipulación de pruebas
- Si la evidencia digital presenta inconsistencias en sus metadatos, puede indicarse una posible alteración.
- La existencia de malware o ataques externos puede ser una explicación alternativa a ciertas actividades informáticas atribuidas al acusado.
Conclusión
Las acusaciones por delitos informáticos deben basarse en pruebas técnicas rigurosas y obtenidas bajo los principios de integridad, trazabilidad y fiabilidad. Sin embargo, errores en los informes periciales pueden llevar a imputaciones erróneas.
Para la defensa, contar con un perito ingeniero en informática especializado es fundamental para detectar inconsistencias en las pruebas digitales y garantizar un proceso judicial justo. La revisión independiente de la evidencia y la impugnación de pruebas defectuosas pueden ser claves para la absolución de un acusado injustamente señalado.